El hecho de tener rascacielos o edificios súper-altos ha sido una de las metas de muchos países durante años, muchos han buscado alcanzar la mayor altura posible, y se han embarcado en proyectos de alta envergadura.
Este es el caso del Kingdom Tower, que se encuentra en construcción en la ciudad de Yeda, Arabia Saudí, cuya altura se espera que sobrepase los 1.000 metros al finalizar su construcción en el 2019.
Inicialmente se pensaba construir el Kingdom Tower con una altura aproximada de 1,500 metros, lo cual resultó imposible por varios motivos.
¿Por qué no se pueden construir edificios mas altos?
El primer factor que imposibilita la construcción de un edificio de tal altura es el viento, cualquier viento, por ligero que sea, a ese nivel puede ser un gran problema para el edificio.
Una solución que se ha planteado a este problema es similar a la empleada en la torre Taipei 101, en Taiwán. Crear un péndulo gigante en la parte superior del edificio que se mueve en sentido contrario al viento.
Otro problema son los ascensores. Tecnológicamente los diseños empleados han llegado al límite y por el momento no hay solución, el problema radica en que cables de más de 600 metros son demasiado pesados para poderse mover con un cabestrante.
Estos edificios necesitan grandes bases, otra posibilidad es un diseño similar a la torre Burj Khalifa de Dubai Con sus 828 metros. El diseño en forma de “Y” con una parte central hexagonal y tres alas que le dan la estabilidad necesaria.
Por el momento hasta que estas dificultades no se soluciones, la construcción de edificios de más de 1.000 metros de altura, seguirá siendo un sueño.