Aunque en muchos países los términos de publicidad y propaganda suelen ser utilizado para referirse a lo mismo, en realidad existen diferencias entre uno y otro.
La propaganda es una forma de comunicación que busca captar adeptos o influir en la forma de actuar de las personas.
Es decir, una propaganda busca convencer al público de realizar una acción específica como puede ser unirse a un determinado grupo o creencia.
Por lo general la propaganda no se utiliza en el ámbito comercial como la publicidad, sino que va más orientada para fines políticos, sociales y religiosos.
El efecto deseado de una propaganda es un cambio en la actitud de una audiencia determinada por lo tanto, puede ser usada como un «arma de guerra» en la lucha ideológica o comercial.